Cirujano Urólogo
Nuestros Procedimientos
La pieloplastia es un procedimiento quirúrgico especializado que se realiza para corregir un estrechamiento o bloqueo en la unión pieloureteral (UPJ), el punto donde el riñón se conecta al uréter. Este bloqueo puede afectar el flujo de orina desde el riñón hacia la vejiga, causando dolor, infecciones recurrentes del tracto urinario, o daño renal. A través de esta intervención, se busca restablecer el flujo normal de orina, mejorando la función renal y aliviando los síntomas del paciente.
La pieloplastia se recomienda en casos de obstrucción de la unión pieloureteral. Esta condición puede ser congénita (presente desde el nacimiento) o desarrollarse más tarde en la vida debido a cicatrices, cálculos renales, traumatismos o tumores. Los síntomas de una obstrucción UPJ pueden incluir:
Dolor en la espalda o el costado - Infecciones urinarias recurrentes - Sangre en la orina - Pérdida de la función renal
Existen principalmente dos enfoques para realizar una pieloplastia:
Pieloplastia Abierta: Este es el método tradicional en el que se realiza una incisión en el costado o el abdomen para acceder al riñón y reparar la obstrucción. Aunque es altamente eficaz, puede implicar un tiempo de recuperación más prolongado debido a la naturaleza invasiva del procedimiento.
Pieloplastia Laparoscópica o Robótica: Este enfoque mínimamente invasivo utiliza pequeñas incisiones y cámaras especializadas para realizar la cirugía. La pieloplastia robótica, en particular, utiliza brazos robóticos controlados por el cirujano para mejorar la precisión y la maniobrabilidad. Esta técnica suele ofrecer una recuperación más rápida, menos dolor postoperatorio y una estancia hospitalaria más corta.
La recuperación de una pieloplastia depende del tipo de procedimiento realizado. Generalmente, los pacientes pueden experimentar algo de dolor o molestias en el sitio de la incisión. Las recomendaciones típicas de recuperación incluyen:
La pieloplastia tiene una alta tasa de éxito, con más del 90% de los pacientes experimentando alivio de los síntomas y mejoría en la función renal. Sin embargo, como con cualquier cirugía, existen riesgos potenciales como infecciones, sangrado o la necesidad de procedimientos adicionales.
La pieloplastia es una solución efectiva para tratar obstrucciones en la unión pieloureteral, ofreciendo alivio de los síntomas y preservando la salud renal a largo plazo. Si experimentas alguno de los síntomas mencionados, es importante consultar a un especialista en urología para determinar el mejor tratamiento para tu caso.