Dr. Omar Alonso
Ruiz Anchondo

¿Cómo se Realiza la Nefrectomía?

La nefrectomía se puede realizar mediante dos métodos:

• Cirugía Abierta: Es el método tradicional en el que se realiza una incisión grande en el costado o el abdomen para extraer el riñón. Este tipo de cirugía se utiliza generalmente cuando el tumor es grande o en casos complejos.

• Cirugía Laparoscópica (o Robótica): Se realizan pequeñas incisiones en el abdomen a través de las cuales se inserta una cámara y los instrumentos quirúrgicos. Este enfoque mínimamente invasivo puede reducir el tiempo de recuperación, el dolor postoperatorio y las cicatrices.

¿Cuándo es Necesaria una Nefrectomía?

La nefrectomía se recomienda en las siguientes situaciones:

• Cáncer de Riñón: Cuando hay un tumor maligno en el riñón, especialmente si es grande o no responde a otros tratamientos.
• Daño Renal Irreversible: En casos donde el riñón ha perdido su funcionalidad por completo debido a enfermedades crónicas, infecciones graves o traumatismos.
• Donación de Riñón: En situaciones de trasplante renal, una persona puede someterse a una nefrectomía para donar su riñón a un paciente necesitado.

Recuperación y Cuidados Postoperatorios

La recuperación de una nefrectomía depende del tipo de cirugía realizada, la salud general del paciente y la razón de la nefrectomía. Sin embargo, hay algunas recomendaciones comunes para una recuperación óptima:

• Hospitalización: Después de una nefrectomía abierta, la estancia hospitalaria puede ser de 5 a 7 días, mientras que una laparoscópica puede requerir solo 2 a 4 días.
• Control del Dolor: Es común experimentar dolor en el área de la incisión, que puede manejarse con medicamentos recetados por el médico.
• Restricciones Físicas: Se aconseja evitar levantar objetos pesados y hacer actividades intensas durante las primeras semanas después de la cirugía.
• Cuidado de la Incisión: Mantener la herida limpia y seca, y seguir las indicaciones médicas sobre cómo cuidar la incisión para prevenir infecciones.